Juan 6,22-29: 23 de abril de 2012

Texto Bíblico:

6 ²² A la mañana siguiente la gente que se había quedado en la otra orilla vio que allí no había más que un bote, siendo así que los discípulos se habían ido solos y Jesús no se había ido con ellos. ²³ Desde Tiberíades llegaron otras barcas y atracaron cerca del lugar donde el Señor dio gracias y ellos comieron el pan. ²⁴ Cuando la gente vio que ni Jesús ni sus discípulos estaban allí, se embarcaron en los botes y se dirigieron a Cafarnaún en busca de Jesús. ²⁵ Lo encontraron a la otra orilla del lago y le preguntaron: -Maestro, ¿cuándo llegaste aquí?

²⁶ Jesús les respondió: -Les aseguro que no me buscan por las señales que han visto, sino porque se han hartado de pan. ²⁷ Trabajen no por un alimento que perece, sino por un alimento que dura y da vida eterna; el que les dará el Hijo del Hombre. En él Dios Padre ha puesto su sello.

²⁸ Le preguntaron: -¿Qué tenemos que hacer para trabajar en las obras de Dios?

²⁹ Jesús les contestó: -La obra de Dios consiste en que ustedes crean en aquél que Él envió.

Comentario (23/4/12):

Jesús nos invita a creer que él es el enviado de Dios. Si lo creemos podremos recibir el alimento que dura y da vida eterna. Ese alimento es Jesús mismo, sus palabras, sus enseñanzas, sus ejemplos de vida.

Si tenemos fe podremos ver claramente lo que ocurre a nuestro alrededor, no nos podrán engañar con falsas promesas de bienestar pasando por encima de los más necesitados, no nos podrán convencer que pasemos por sobre nuestros principios para obtener bienes materiales que son efímeros, no seguiremos a falsos profetas sino que permaneceremos fieles.

Si tenemos fe trabajaremos para el bienestar de nuestros hermanos, para que nuestra sociedad tenga justicia, solidaridad, paz, amor y alegría.

Hace unos días escuché que, según una encuesta realizada en Latinoamérica, Chile es un país triste en comparación con otros países que tienen un menor bienestar económico. Creo que sería un buen consejo no correr por tener muchos bienes materiales, pero sí correr para estar con nuestras familias, amigos y hermanos.

Sigamos a Jesús para recibir el pan de la vida que nos impulsa a vivir en comunidad. Amén.

Jessica